Cada vez que atravesamos un proceso de inestabilidad política, descubrimos rostros nuevos que hacen que nos preguntemos ¿cómo esa escoria terminó llegando tan alto?
Para quienes estamos en política y vemos a esos personajes antes, durante y después de su ascenso al poder, podemos describir con mayor fastidio, pero precisión, cómo lo logran (y qué características tienen).
Comencemos por identificar a la escoria.
Características de una escoria política
El factor unificador y determinante de todos ellos es su necesidad de dinero. No pueden obtenerlo desde el sector privado, porque por concepto, son ineficientes y su capacidad casi nula, por lo que jamás podrían ganar lo que desean por ese medio.
Tampoco podrían hacer una empresa de buenas a primeras, que vendría a ser la opción que les dé igual o más dinero que el cargo político que ostentan, porque les gusta lo fácil y emprender, por supuesto que no lo es.
Trabajar en el sector público, en cambio, es una solución momentánea. Pero ojo, no es un digno servidor público común, es uno que entra a trabajar a un cargo de confianza de aquel amigo que podría pagarle lo que, por sus propios méritos no podría ganar en otra parte.
Entonces, ya sabes por qué no encaja en otra parte.
Una característica más: Una escoria política es necia y persistente. Algo que muchas personas que buscan aportar o eficiencia en sus vidas no son.
El camino de la escoria
Habiendo dicho ya las características anteriores, prioricemos la necedad que viene acompañada de una seguridad envidiable. Esto les permite a estas personas iniciar su travesía por la vida política.
Primero postulan a un cargo, no importa si no tienen los recursos necesarios. Solo lo hacen, se lanzan al ruedo sin pensarlo más. Total, si no es por propia virtud, puede ser por suerte que se obtiene el cargo.
Si pierden, postulan a las próximas elecciones, no importa que no sea al mismo cargo, lo importante es postular a algo. Si pierden, repiten el proceso durante años, hasta que llega el día en que ganan.
¿Qué implicancias tiene su victoria?
Aparte de ser gobernados en alguna localidad o representados por un neandertal succionador de dinero, sucede algo que los empodera más. Obtienen recursos fáciles (contactos, poder, dinero) para afrontar, luego del cargo, otra elección. Pero esta vez, con todo lo que nunca antes tuvieron. Y así comienzan a enquistarse.
Si saliendo del cargo que tienen, se alistan para otra elección y ganan, disfruta al menos 4 años más a la escoria en un lugar de toma de decisiones. La escoria, por supuesto, empodera durante sus años de poder a otras “escoritas” y así, juntos, le cierran el paso a los buenos elementos que desean participar.
Esto pasa porque ellos hacen lo que “los buenos” no. Estar ahí y recordar todos los días que el que la sigue la consigue. ¿Se imaginan qué ocurriría si muchas buenas personas siguieran la misma receta?